Uno de mis regalos de Reyes, ha sido una tarjeta regalo de los famosos centros comerciales... según dicen, de Inglaterra. La persona que me lo regaló me aconsejó que lo usara en los primeros días de las rebajas para que no estuviera todo tan escogido y además me aseguró que vendría conmigo y que no tendría inconveniente en sumergirse en ese mundo de muchedumbre mareada y desquiciante, yo me resistía porque cuando voy de compras es sólo cuando realmente necesito algo y me gusta ir tranquila, sin prisas ni aglomeraciones, no soy asidua de las rebajas ni me gusta discutir con nadie por la manga de un jersey.... en definitiva... no soy gastosa ni compro por comprar...puede que porque nunca he estado acostumbrada a tener una economía que me permitiera invertir en caprichos y sé valorar lo poco o mucho que pueda tener.
Cuando llegamos a los mencionados almacenes y puse el pie derecho en las rejillas del suelo (si llego a entrar con el pie izquierdo, seguro que mando a mi acompañante a tomar por el trasero con tarjeta de regalo incluida...soy así de "fisna", qué le voy a hacer), sabíamos que no nos habíamos equivocado de puerta porque el sitio es muy conocido y su sección de joyería tiene muchos adeptos, pero cuando levantamos la mirada no se veían más que coronillas más o menos pobladas, con mechas, con canas, con falta de pelo en casi o toda la chorla, teñidas en colores que hace 30 años hubieran sido impensables y que se movían en todas direcciones con alucinante rapidez, tal cual "niña de peli de terror". Nos abrimos paso como pudimos, incorporándonos a la marea...no...al tsunami humano y nos dejamos llevar...
En una de las recaladas de los puertos obligatorios, ésto es,... Desigual, Tintoretto, ....y otras marcas exclusivas difíciles de hincar el diente, encontré una prenda que me gustó y nos dispusimos a ocupar nuestro enésimo puesto en la cola de la caja, si recordáis...soy hipotensa, y estar a pie parado mucho tiempo, me produce una bajada considerable de tensión con todas sus consecuencias.
Empecé a notar un sudorcillo sospechoso y la vista... primero nublada y después doble, me jugó una mala pasada, cuando intentaba levantarla, sólo veía en modo zoom, cientos...miles de cabezas que se agrandaban o se reducían como si las estuviera mirando a través de las dos caras de una lupa... cuando mi acompañante me miró y vio que el maquillaje de mi cara había desaparecido misteriosamente, pidió un asiento a la cajera, que, la verdad sea dicha, se apresuró a facilitarme una silla junto a la caja, y como no hay mal que por bien no venga, ésto sirvió para que me cobrara saltándome los puestos de la enorme cola, no sé yo si por miedo a que me fuera y perder la venta.
Empecé a notar un sudorcillo sospechoso y la vista... primero nublada y después doble, me jugó una mala pasada, cuando intentaba levantarla, sólo veía en modo zoom, cientos...miles de cabezas que se agrandaban o se reducían como si las estuviera mirando a través de las dos caras de una lupa... cuando mi acompañante me miró y vio que el maquillaje de mi cara había desaparecido misteriosamente, pidió un asiento a la cajera, que, la verdad sea dicha, se apresuró a facilitarme una silla junto a la caja, y como no hay mal que por bien no venga, ésto sirvió para que me cobrara saltándome los puestos de la enorme cola, no sé yo si por miedo a que me fuera y perder la venta.
Mientras esperaba un poco a que me pasara el malestar, se acercaron a pagar una pareja de jóvenes guiris con varias prendas en las manos, el chico intentó explicarle a la cajera el problema que tenía con muy pocas palabras chapurreadas en español....la cajera, en sus vanos intentos por entender lo que decía, llamó al encargado de sección y este pobre hombre sudaba más que yo con mi indisposición al comprobar que estos chicos se estaban empezando a sentir violentos ante la falta de entendimiento por ambas partes. Hubo un tercer intento con otro encargado distinto que terminó diciendo repetidamente "sorry, sorry". Cuando me sentí mejor, mi acompañante se adelantó unos pasos y mantuvo una conversación fluida con los chicos extranjeros hasta enterarse del problema, el cual transmitió a la cajera y se pudo solucionar, no sin antes decirles a los encargados de sección presentes, que por favor les dijeran a sus jefes que, o bien pagaban cursos de idiomas a sus empleados o mejor cambiaban la nacionalidad al "Corte". ¡¡Parece mentira!!
Después de mi...experiencia rebajil, comprenderéis que no me quedaran ganas de seguir pateando calles y sorteando toda clase de pies calzados.
A mí tampoco me gustan las aglomeraciones. Yo fui una vez y me agobié tanto que ya no voy. También soy hipotensa, pero debe ser desde hace un par de años, porque nunca me había mareado hasta entonces y me asusté muchísimo.
ResponderEliminarCreo que tampoco iría a las rebajas de no ser por aprovechar alguna tarjeta regalo. Pero eso sí, con mi bolsita de chuches conmigo por si las moscas. Besos!!
Por eso fui, Cecilia, porque la tarjeta regalo es de un importe nada despreciable y tengo que agotarlo, todavía queda saldo y no sé cuando volvere a ir.
EliminarLa tensión es fácilmente controlable cuando se saben los motivos que la causa, en mi caso, lo sé y procuro no dar lugar a ello, pero en algunas situaciones es casi inevitable.
Besos apretaos, Cecilia.
A mi no me gusta ir de compras, con que no te digo si es en rebajas.
ResponderEliminarBesos.
Pues ya somos dos,,,, no, creo que somos muchos los que nos agobiamos con las compras, aunque de vez en cuando son necesarias.
EliminarApretaos.
Yo soy de comprar rápido, pero porque odio ir a comprar sea la fecha que sea. Lo hago porque no tengo más remedio, pero por lo que no paso es por ir a las rebajas ni loca,ya tengo bastante con comprar en Navidad que no son rebajas pero es lo más aproximadísimo que hay y es un horror.
ResponderEliminarEn cuanto a los idiomas...qué decir, España...sin ir más lejos...
Cuídate esa tensión. Yo también soy hipotensa y sé que es lo que hay, pero!
Besos.
Así es, Marinel, yo no comprendo a quienes no les importa meterse en esas aglomeraciones para comprar si siempre hay de todo por todos sitios.
EliminarNo creo que España sea número uno en casi nada pero en los de los idiomas y el nivel de estudios, me parece a mi que no.
No te preocupes, amiga, soy muchos "hipos" pero los mantengo a raya, jajaja.
Si ya (me) agobia ir a comprar, ya ni te cuento en rebajas. Una locura. Qué triste que no haya entendimiento, con toda la gente que se defiende en inglés y en varios idiomas y gente que lo habla perfectamente y están o en su casa o fuera de ella y, en consecuencia, del país. Así pasa...
ResponderEliminarCuídate yeste!! Un beeeso fuerte.
También es verdad que hay muchísima gente preparada pero quizás no esperen precisamente un puesto de vendedor, supongo que si tienen una buena preparación laboral es porque lo han hecho pensando en cotas más altas, de todas formas, precisamente es esa clase de establecimientos, no digo yo que les exijan idiomas a las cajeras y vendedoras pero por lo menos, sí, a los que tienen puestos de más responsabilidad.
EliminarBesos apretaos.
Claro yeste, esperan más pero es que no encuentran trabajo ni en puestos mucho menos cualificados. Luego los jefecillos de turno son los que menos formados están y mejor viven. En general, es demasiado triste todo...
Eliminar¡Horror! Las aglomeraciones me matan, no ir es la mejor opción.
ResponderEliminarBeso
jajaja, veo que somos muchos a los que no nos gustan las multitudes.
EliminarBedsos apretaos, Malque.
Mis hijas siempre se quejan porque a ellas les encantaría ir a las rebajas el primer día, ahí con el follón, y a mí me horroriza sólo pensarlo... al final me toca ir con ellas pero a su debido tiempo, para el próximo finde ;)
ResponderEliminarBesinos
Así, así, con tranquilidad....pero vamos, pedirle eso a los jóvenes es casi imposible.
EliminarBesos apretaos.
En general no me gusta ir de tiendas, imagina en rebajas, no suelo hacerlo. A veces coincide que necesito algo y cuando entro a comprar es cuando recuerdo que además hay rebajas, no sirvo para eso, ni para las aglomeraciones ni para lanzarme encima de una pieza como si me fuera la vida en ello.
ResponderEliminarEste finde, por no mentir he ido, pero porque me lo pidió el coriano, que apura tanto su ropa que cuando se decide hay que ir o se pasa otros diez años con la misma ropa, pero aprovechamos factores: domingo, por la mañana, lloviznando y nada de centros comerciales, en la pequeña ciudad que tengo a 5 km de mi pueblo, que nada tiene que ver con ir a Barcelona, las calles y las tiendas eran nuestras jaja, así si que sí.
Por cierto, no comprendo lo del inglés, porque luego miras las solicitudes de trabajo y no sólo te exigen ingles, si no hasta francés y ruso a la que te descuidas, yo ya ni acudo, y por lo que veo luego ni papa.
Besitos
Hombre, ir de compras es necesario al menos un par de veces al año, jajaja, para cualquier cosa que haya que reponer enla casa, no sólo ropa.
EliminarA mi me gusta pasear por el centro, ver tiendas aunque no compre pero siempre siempre, cuando yo decida, un día cualquiera entre semana, con tranquilidad y sin hora de vuelta a casa y claro, eso es, como te digo, una o dos veces en el año.
Inma, los curriculums se engordan cada vez más por la necesidad de encontrar un trabajo y resulta que cuando se solicita un puesto de trabajo, todos están altamente "cualificados"... pero lo peor es que cuando los entrevistan, si lo hacen, nadie comprueba "in situ" ese nivel alto que ha hecho constar, tanto en idiomas como en informática y para colmo, el entrevistador a veces, ni siquiera sabe idiomas para comprobar el nivel del "usuario".
Apretaos, amiga Inma.
Y ahí están las consecuencias de contratar a alguien que en el currículum pone que tiene un nivel de inglés "medio". Espero que estés mejor. Biquiños!
ResponderEliminarSí, eso es exactamente lo que comento a Inma, pero no sólo son ellos los culpables, tampoco les hacen pasar la prueba en la que verdaderamente les hagan demostrar su cualificación... y así después nos encontramos a veces en situaciones verdaderamente comprometidas.
EliminarSi, Mandi, la tensión tiene sus vaivenes pero no son duraderos, si fuera hipertensión, sería peor. Estoy bien.
Besos apretaos
Me estresan las rebajas a niveles brutales. Eso de los bajones de tensión en las colas lo he vivido yo también y es de lo más desagradable. En cuanto a lo del inglés, en fin, pocas son las empresas donde puedas dar con alguien que realmente se desenvuelva en dicho idioma (o en cualquier otro). En unos grandes almacenes de semejante fama no digo que todos tengan que hablar un segundo idioma con fluidez pero debería haber, al menos, alguien que sí lo hablara. Un besote!!!
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo contigo.
EliminarPor curiosidad me gustaría saber cuántos de los encargados, jefes o directivos de los grandes almacenes, pueden hablar, aunque sea un idioma, con fluidez.
Besos apretaos.
Bueno ir de compras guste más o menos es necesario, pero lo de las rebajas un camelo de tomo y lomo.
ResponderEliminarBesos.
Son fechas de locuras y a veces de gasto innecesario.
EliminarBesos apretaos.
A mí también me marean las multitudes. Un beso.
ResponderEliminarEstá visto que la mitad de la población no aguantamos esa situación y la otra mitad se mete de cabeza gustosa.
EliminarBesos apretaos
Te comprendo muy bien, Yeste: no hay experiencia más terrorífica que acercarse a la Puerta de Sol durante toda la temporada de Navidad. Por mucha falta que haga comprar algo es preferible huir del centro e ir a buscarlo por los barrios.
ResponderEliminarY sí, una lástima lo nuestro con el inglés: en Holanda, en Alemania, en Francia, hasta el más humilde vendedor de periódicos te habla en un inglés fluido, es patético que entre nosotros no lo domine nadie (al menos en nuestra generación).
Cuando me casé y en los primeros años, lo hablaba con fluidez, puede que no con la perfección que tienen los jóvenes de hoy, pero me defendía bien.....ahora después de tantísimos años sin hablarlo, sin practicar y sin relacionarme, puedo decir, que lo he olvidado casi todo, lo leo mejor que lo hablo por los años de abandono. Ya no puedo decir que hablo inglés.
EliminarEs la ventaja que nos sacan los jóvenes, están mucho mejor preparados.
Besos, Fernando
¿Y para qué tienes las tiendas online?
ResponderEliminar¡Pués para comprar desde casita, tranquila, relajada, tumbada en tu sofá y tamándote lo que más te guste! jajajajjajaja
Lo del inglés en este país es terrible, porque lo triste es que se pasan años y años estudiándolo y no sé que ocurre, que la cosa no cuaja.
Besazo, hermosa
Jajaja, ahí, ahí! barriendo para casa, di que sí
EliminarJajajaja...sí hija, sí, a ver si amplías tu negocio a ropa, calzado, ropa interior....y te aseguro que no me mueve de mi casa para comprar ni el tato.
EliminarBueno, ahora te explico, las tarjetas de regalo no se pueden utilizar para compra online y no es cosa de desaprovecharlas, pero lo bueno que tienen es que te dan una año para poder utilizarlas sin que tengas restricción alguna de temporada, así que creo que quizás la utilice el invierno que viene, jajaja. si tengo la tensión bien....jeje.
Apretaos, Doleguita.
Ahí....mi jefa siempre al quite... esdtá en todo...como debe ser.
EliminarA mi si me gusta ir de compras, pero claro no en rebajas con tanta gente tirándolo todo por el suelo... :-)
ResponderEliminarBesos completos, sin rebajas.
Pues me parece que hasta ahora, has sido el único que has dicho "Sí" a las compras.... y aún extraña más tratándose de un hombre. jajaja
EliminarLo que yo conozco del sexo masculino en cuanto a ir de compras, te puedo asegurar que es desastroso, a la mayoría les aburre soberamente y no les gusta dar vueltas para mirar..... a menos que vayan solos y las compras sean para él, jajaja.
Besos, Alberto.
Yo si voy de rebajas es porque obviamente necesito reponer, pero comprar por comprar, no. Eso sí, me gusta ir sola, sin nadie que me espere mientras me paro a mirar, a mi bola, tranquilamente. Me da reparo que estén pendientes...y fíjate tú que a Maromo no le importa salir de compras (sí, es rarito hasta para eso) y me echa en cara que soy de las pocas mujeres que no les gusta comprar. Ya le he dicho que no me gusta comprar con él ni con nadie, que odio que me estén esperando o estar esperando yo. Yo soy de mirar, probar y largarme. Me duelen las lumbares después de un tiempo en las plataformas comerciales y acabo rota.
ResponderEliminarEn fin, qué te voy a contar que tú ya no sepas con lo que nos has contado...
Cuídate esa tensión!!! Besazos!
Jajaja... si es que un día de rebajas es el equivalente a uno de zafarrancho de combate en tu casa... te deja molida...
ResponderEliminarMaromo tiene que ser un encanto... porque mira que es raro que un hombre le guste ir de compras. Y las mujeres somos unas pesadas de mucho cuidao.
Besos apretaos
No sé yo qué decirte. No toma actitud pasiva sino mirando y remirando si le gusta o no la ropa que elijo. Lo lleva claro si piensa someterme... jaja
EliminarLas rebajas es algo a lo que muchos están enganchados y además siempre vienen bien.
ResponderEliminarUn Abrazo Yeste :) .
Claro que vienen bien en el precio, Joaquín, pero yo, personalmente, prefiero comprar menos y en temporada.....no soporto la muchedumbre enloquecida.
ResponderEliminarBesos apretaos
Bueeeno si te sirve puedo decirte que en esos grandes almacenes hay una o un intérprete que por otro lado suele estar ilocalizable jjejjejjejje
ResponderEliminarQue hablar inglispitinglis está muy bien pero que no olvidemos que nosotros cuando vamos fuera no nos entran pampurrios cuando ni el tato habla español y tampoco nos entienden en galerias tan grandes como en las Lafayyete, asi que solo una sugerencia..que cambien lo de ingles por....
Eso lo dejo a gusto del consumidor jejjejje
Ahhhh y te cuento un secretito asi bajito...mejor que en rebajas es esperar promociones puntuales que se hacen en temporada normal para incentivar el consumo
Besos con alas muchas alas para ti
Muchas gracias por la información, te guardo el secreto.
ResponderEliminarEs verdad que tampoco es obligatorio que sepan español en el extranjero pero se supone que el inglés es el.idioma más universal ¿no? Y si no...eso mismo...que le cambien el.nombre al Corte... jajajajaja
Besos Lehahiah