Inmersa en:

INMERSA EN: NADA ENTRE MANOS....ESPERANDO GANAS.



domingo, 25 de enero de 2015

PURA AGONÍA




No puede acudir a nadie, no tiene a nadie, ni vecinos cercanos, ni amigos que le acompañen en sus penas y alegrías con los que pueda compartir tardes de compras, un simple café de merienda o una confidencia de sus pesares sentimentales.

El estar siempre sola nunca ha sido para ella un problema, se acostumbró al vacío, a escuchar el silencio, a ver en la ocuridad la claridad de sus pensamientos, a sentir su cuerpo vibrar con sus propias caricias, a limitar su sed de compañía a las voces que salían de un aparato de radio viejo y ennegrecido por el tiempo...

Ese día, al levantarse, cambió su rutina inesperadamente, por norma, salía de su habitación en camisón derecha a la cocina, casi a oscuras, puesto que la edad le había  concedido algunas licencias maniáticas y antes de acostarse la noche antes, dejaba persianas, ventanas y cortinas completamente cerradas....y antes de entrar al baño se preparaba una infusión.  Esa mañana hizo lo contrario, fue encendiendo luces hasta llegar a la cocina, como si no quisiera andar a ciegas por temor a los obstáculos, esperó a que hirviera el agua e introdujo dos bolsitas en la taza, después al baño... abrió el grifo del agua caliente, vertió sales de un frasco y daba pequeños sorbos de su mentapoleo humeante mientras, despacio, iba dejando caer al suelo el camisón de seda que la había cubierto hasta ese momento. Se terminó el contenido de la taza, se metió en el agua espumosa sin importarle que su temperatura no fuera la adecuada para un baño relajante, ni siquiera se dio cuenta de que su piel enrojecía por momentos, sólo deseaba estar sumergida hasta el cuello y que sus ojos no pudieran ver el cuerpo desnudo sediento de contactos y de roces que ella misma le proporcionaba.  Cerró los ojos y dejó la mente en blanco, no quería pensar; en ese instante y aunque sabía que era producto de su imaginación, le pareció oír el picaporte de la puerta del baño... desechó la idea, su casa estaba casi herméticamente cerrada.

Salió con cuidado de la bañera, su piel despedía vaho cálido que se fundía con la bruma que inundaba el espacioso cuarto de baño decorado con  losas amarillas en las paredes, extendió la mano  para coger la toalla y... lo sintió...sintió, a pesar del calor que reinaba, un calor distinto, adivinó una presencia caliente con olor a deseo y no le dio tiempo a buscar con sus ojos lo que la había estremecido.  Una mano la agarró fuertemente por el pelo y la hizo caer al suelo húmedo y resbaladizo, una vez tendida e inmovilizada, notó cómo la recorrían de arriba a abajo, cómo la mordían suavemente primero y con rabia después, cómo le separaban las piernas y la penetraban.... ¡No, Dios mío, así no! lloraba y gemía...gemía y lloraba, lo había estado esperando tantos años, había ansiado vivir esos momentos que tantas veces vió en películas, había soñado con entregarse en cuerpo y alma al hombre que nunca conoció...pero no así...gritaba de dolor, así no quería... prefería mil veces morir antes de que alguien le arrebatara lo que guardaba para otro, lo que sólo ella podía tocar.....¡¡No, prefiero morir!!

Perdió la noción del tiempo y probablemente la conciencia porque no recordaba cómo había terminado todo, aunque eso era lo que menos le preocupaba, seguramente sería su recuerdo más doloroso y no le importaba olvidarlo, se incorporó como pudo, sujetándose a la barra del toallero, algo le dolía abajo, en el vientre, pero tenía que salir de allí..... Cuando ya estuvo en pie, se miró al espejo, pudo ver lo pálida que estaba y lo revuelto que tenía el pelo, se dispuso a salir de la habitación pero tropezó con algo, miró hacia abajo y la sorpresa dejó en su cara  una mueca de horror...allí en las baldosas negras había un charco que destacaba por su color, rojo, brillante, húmedo... y un poco más a la izquierda, sólo un poco, estaba ella, con su cuerpo retorcido, con los ojos mirando al infinito y con varias puñaladas en el vientre..... Otra vez la oscura soledad.





Amigos, los que tengáis algo de memoria, recordaréis este relato de 2013.  Perdonadme por publicar reposiciones de vez en cuando, mi tiempo ahora mismo, ni es mucho ni es propicio...





 

viernes, 16 de enero de 2015

(LA FUERZA DEL VIENTO)





Como el viento mece los árboles.... así, con suaves vaivenes, quiero que sea tu vida.


Con esa energía que tiene para hacer girar la veleta en la dirección de su antojo.


Con la delicadeza que trata a las verdes hojas de sus plantas.


Con esa inquebrantable fuerza que arremete contra los obstáculos.

Con la brisa ligera que acaricia tu cara y te hace sentir diferente.

Con la firme voluntad de seguir en el camino elegido....así....así quiero que sea tu vida.... como el viento, porque a pesar de su inconstancia, siempre será constante.




(Para ti, con cariño)





jueves, 8 de enero de 2015

ÉL SABE...


 
  Es inútil... inútil... pretender que el Tiempo pase  a disposición de cada uno, que podamos elegir en qué queremos que vuele rápido y en qué  ralentice cuando nos convenga.... es inútil.
 
Él tiene claro su recorrido, sabe en qué etapas de su vida tiene que dar licencia para algunas cosas y cuándo frenar los impulsos inadecuados... él sabe, mejor que nadie, qué deja vivir en cada secuencia, qué emociones debe dar con cada otoño, qué pasiones repartir en sus primaveras, él sabe...
 
Sabe decir no, a las incongruencias, a las locuras, a la inestabilidad, a los sensaciones  propias de sus primeros pasos, a su inmadura madurez. 
 
Él tiene claro que nace con una misión que cumplir... llevarnos por el camino apropiado, procurando que lleguemos derechos a su invierno, cuidando que no salgamos de lo que él ha dispuesto a menos que corramos el riesgo de oír sus retahílas, sus advertencias, su risa cruel, su mirada burlona y por lo tanto, sus consecuencias
 
Y sabe vengarse, sabe cómo hacer para que las decisiones duelan si no son las acertadas, él, el sabio, el que nunca se equivoca y sabe recordar los errores ajenos, él, el despiadado, el que no otorga ni alarga un plazo a quien se lo pide suplicando, al que no le importa comprobar las huellas que ha ido dejando ni las decepciones  que fueron pasando... Inmóvil ante el dolor y las lágrimas, con él, no valen argucias ni engaños, ni siquiera pedir que cierre los ojos a  los sentimientos inoportunos... él sabe...
 
 
 
 
 
 
 

lunes, 5 de enero de 2015

DESEOS.....¡SERÁ POR PEDIR!





Todos tenemos sueños y anhelos que nos gustaría que se cumplieran. He oído o leído en alguna parte que si se escriben las peticiones en un papel y después se quema, hay más probabilidad de que se hagan realidad. Pues bien, voy a probar a escribir todo lo que quiero y ver qué pasa.

Quiero una escalera sinfin o una planta de judías mágicas.
Quiero ir aprendiendo lo mucho que aún me falta por saber.
Quiero pasear cogida de la mano.
Quiero que todo el mundo tenga la oportunidad de ser feliz.
Quiero que me den los buenos días por la mañana y las buenas noches al acostarme.
Quiero que todos los niños del mundo tengan una sonrisa en los labios.
Quiero un balcón en las nubes y poder subir con la escalera de antes.
Quiero ver una peli en la tele sin dormirme en los "intermedios".
Quiero que el color de nuestra piel no nos haga diferentes.
Quiero que las armas callen para siempre.
Quiero que el "telediario" anuncie alguna buena noticia.
Quiero que no se pierdan los principios y los valores en la educación.
Quiero dar besos y abrazos y recibirlos.
Quiero querer ...... y que me quieran.
Quiero que las personas sepan valorar lo que tienen.
Quiero que la gente luche por no perder lo ganado.
Y sobre todo...
Quiero que Dios me dé fuerzas para seguir... o asomarme a ese balcón y comprobar que todo se va cumpliendo.
Quiero.... tanto......


Pero como no doy mucho crédito a los rumores, no voy a quemar el papel, prefiero compartir mis peticiones con los buenos amigos... porque lo que sí es verdad es que los sueños compartidos son los más conseguidos.



Ya os habéis dado cuenta de que es mi reposición de todos los años, deseos que voy aumentando cada nuevo año y que si se pudieran conseguir sólo cerrando los ojos y pidiéndolo con todas mis fuerzas, nadie me los podría negar.