Este apartado es para informaros que Chema, de Bitácora de Macondo, me ha hecho el gran honor de incluirme en sus Macondografías. Os invito a pasar por su casa y a que leáis las diferentes entrevistas que ha incluído en su sección.
Me cruzo por la calle con infinidad de caras serias o sonrientes y me da por pensar... ¿Cómo son?... ¿Buenas personas?...¿Serán malas?... y empiezan mis cavilaciones.
Cómo puedo saber si alguien tiene buenos sentimientos o no, si es una persona honesta o estafa a sus semejantes, si se preocupa por los suyos o por el contrario lleva una vida totalmente paralela a lo que se cree de ella, cómo saber si se puede confiar en ella...contar con ella cuando se tenga necesidad de ayuda...¿cómo saber eso?
¿Pueden saber unos hijos que sus padres les quieren incondicionalmente sólo por la forma de comportarse?
No, no sabré nunca si me cruzo con un ángel o con un demonio.
O con un demonio con cara de ángel.
O con un ángel con cara de demonio.
O con alguien que lleva dentro a los dos.
Imposible llegar a pensar que unos padres les hagan tanto daño a sus ángeles.
Imposible pensar que no les querían, que les estorbaban.
Imposible pensar que alguien se regocije en el dolor de los demás.
Imposible pensar que alguien disfrute segando vidas.
Imposible pensar que hay tantos demonios sueltos.
Pero...¿Y ángeles, hay?
No lo sé, sólo sé que hay buenas personas, nunca les he visto las alas.
Constantemente encontramos gente dispuesta a ayudar a quien lo necesite, madres y padres que lo dan todo por proteger a los suyos, gente que sufre con el dolor y la impotencia ajenos, gente que lucha contra los demonios disfrazados...
¿Pero qué hay más, ángeles o demonios?
No sé, sólo puedo decir que cada vez son más ángeles a los que echar de menos.
En condiciones normales hay mucho indefinido, o moderadamente ángel, o moderadamente demonio. Es en las situaciones límite cuando sale lo que lleva cada uno dentro.
ResponderEliminarGracias por la cita.
Apretaos.
Siempre he pensado eso, que cada uno llevamos dentro a los dos en según qué situaciones, pero también sé que a veces nacemos ya con un demonio dentro que se va haciendo cada vez más fuerte y termina haciendo mucho daño de una forma u otra.
ResponderEliminarA ti por todo.
Besos apretaos.
Primero que todo, muchísimas gracias por citarme en la macondografía, no te imaginas la ilusión que me ha hecho. Es todo un honor y me han encantado las palabras que nos has dedicado tanto a Consuelo como a mí.
ResponderEliminarY con respecto al post de hoy, creo, como Macondo y como tú que todos tenemos algo de ángel y demonio, sin llegar a extremos, pero creo, o quiero creer que hay muchísimos más ángeles que demonios, lo que pasa es que los demonios se ven más y nos llaman más la atención.
Un abrazo muy, muy apretao. Besitos.
No me tienes que dar las gracias, María José, es solo justicia.
ResponderEliminarSupongo que es así, pero es verdad que las acciones angelicales nio salen en las noticias y las demoníacas, aparte de que nos dejan sin algunos ángeles...ésas tienen mucho morbo y todo el mundo se entera.
Más apretaos para tí.
Leída y comentada queda la Macondografía. Enhorabuena!!
ResponderEliminarYo siempre he creído que hay más ángeles. El problema es que ser bueno es lo que se suele esperar de la gente, de manera que cuando una persona es buena gente pasa más desapercibida que cuando no lo es. Por eso parece que hay más demonios, porque llaman más la atención. Pero no. Hay más ángeles, o así quiero verlo yo... Besotes!!!
Gracias Álter por tus palabras aquí y allí.
EliminarEs así, yo también creo que TIENE que haber más ángeles que personas malas aunque tampoco es como aquello de..."Tó er mundo e güeno", porque por desgracia, casi cada día te encuentras con alguna maldad.
Besos apretaos, amiga.
HE LLEGADO POR ACÁ GRACIAS A LA MACONDOGRAFÍA DE MACONDO (VALGA LA REDUNDANCIA) Y HE DECIDO QUEDARME. TE SIGO Y Y TE IRÉ COMENTANDO.
ResponderEliminarSALUDOS
CARLOS
Muchas gracias, Carlos, ya te he visitado yo también y estoy segura de que nos seguiremos mutuamente.
EliminarBienvenido a mi casa.
Enhorabuena por la macondografía, me ha encantado.
ResponderEliminarYo creo que hay más ángeles que demonios, lo que ocurre es que los demonios hacen más ruido y se ven más, los ángeles pasan más desapercibidos, no? yo al menos así lo quiero creer.
Besinos
Sí, Covadonga, está visto que en el infierno son más ruidosos.... eso no quiere decir que no estemos rodeados de ángeles sin saberlo, por suerte .
EliminarGracias por tus palabras en la Macondografía, me alegro de que te haya gustado.
Besos apretaos.
Me voy a montar una estadística por mi cuenta y riesgo. Creo que la mayoría no somos ni ángeles ni demonios, es decir, pongamos que un 80% somos incapaces de hacer el mal porque sí, no entra en nuestros esquemas, pero tampoco hacemos el bien desinteresadamente por cualquiera, sólo por aquellos que queremos, luego hay un 15% de verdaderos ángeles, personas maravillosas, capaces de darse a los demás y hacer el bien activamente, no sólo como ausencia del mal, y un 5% de demonios, pero que como dice Covadonga, Álter y opinamos casi todos, llaman mucho más la atención y se les da más publicidad. El bien no vende Yeste.
ResponderEliminarBesitos
¡¡Madre mia!!, que peazo documentación, jefa, de dónde han salido estas estadísticas?, jajaja....qué precisión...pero estoy de acuerdo en tu exposición aunque no sé si los porcentajes son ciertos.
EliminarEl post es una forma de plantearme a mí misma lo que se puede encontrar por el mundo sin siquiera saber que hasta puedes llegar a ser vecino, amigo o incluso convivir con un demonio sin parecerlo... claro que por esa regla de tres, todos los que no son demonios podrían entrar en el apartado de ángeles y tampoco es así.
Es una pena que, como tú dices, el bien no venda, me encantaría escuchar en las noticias las buenas acciones de la gente, lo que se ha conseguido porque alguien ha tenido capacidad de ayudar y lo ha hecho... y sin embargo, el morbo de las maldades cometidas por los demonios cubren las portadas y las primeras páginas de los medios informativos... sólo nos enteramos de la solidaridad de las personas en momentos puntuales y en fiestas puntuales.
Besos apretaos.
Gracias Zum.
ResponderEliminar¿qué me estás queriendo decir? ¿que tengo que tener cuidado contigo?
¿por unas galletas?, jajaja, no te preocupes mujer, avisa cuando vengas y te preparo un buen plato.
Bienvenida a mi casa, pasaré a conocerte...faltaría más.
Besos apretaos.
Sería genial pensar que hay más ángeles que demonios, yo creo que los hay pero no llaman tanto la atención como los otros. Por cada demonio que vemos en la televisión, o se habla de el, cuántos ángeles anónimos hay por ahí escondidos que no vemos ni conocemos?
ResponderEliminarBesos Yeste!!
Hay que pensarlo, Laura, porque sino, qué sería de nosotros si nuestro mundo fuera el mismísimo infierno... además yo no puedo decir eso ya que, la verdad, estoy rodeada de gente buena, tengo mis propios ángeles.
ResponderEliminarBesos apretaos, Laura
Me temo que todos tenemos un poco de ambos, pero algunos tienen mucho de uno sólo. Un beso.
ResponderEliminarEso es, Susana, todos tenemos muchas dualidades, pero ésa es la peor y hay quienes sólo alimentan la parte más negativa.
ResponderEliminarGracias por tus palabras.
Besos
Es todo un concierto de ángeles y demonios con el que nos cruzamos a diario. Probablemente jamás sabremos con cuál de ellos nos cruzamos, pero es bien cierto que parecen propagarse como la pólvora esos demonios agazapados que cada vez tienden más a salir...
ResponderEliminarVoy p'allá a ver lo de Macondo.
:)
Besos.
Lo malo de estas cosas es que no te das cuenta de quién estás rodeada hasta que no dan la cara.
EliminarGracias Marinel.
Hay según veo yo mas demonios, que ángeles...solo hay que ver como esta el mundo...
ResponderEliminarBesos
Me sigo negando a que haya más gente mala, si no estaríamos viviendo en un infierno y todavía no hemos bajado.
EliminarBesos apretaos.
Quiero seguir creyendo que hay más personas ángeles, silenciosos y entregados y porque no hacen ruido no llegamos a saber de ellos a no ser que los tengamos cerca. Pero cuando una noticia salta a los medios sobre lo que han hecho unos padres con su hija...sólo ves la maldad filtrándose por todos los resquicios y saliéndose con la suya creándote una sensación de impotencia terrible.
ResponderEliminar¡Felicidades por la macondografía!
Un beso Yestey feliz fin de semana :)
Pienso que lo mismo la maldad que la bondad tienen que ser alimentadas para salir a la luz, aunque haya personas que ya nacen con el demonio dentro.
EliminarMe alegro de que te haya gustado la Macondografía.
Besos apretaos
Soy más de la opinión de Inma, pero no tengo mi ábaco a mano para concretar cifras, jejeje, ella además es más lista y seguro que echa mentalmente las cuentas ;D
ResponderEliminarQuienes no hacen el daño a puesta deben de ser la inmensa mayoría, pero tampoco les convierte en Ángeles. Comparando el inmenso e irreparable dolor que pueden causar los demonios... los ángeles deberían de prodigar felicidad a los demás, por lo menos en forma comparable si ponemos ambas consecuencias en una báscula.
Gente así... no me viene tanta a la mente... Sor teresa de Calcuta, Vicente Ferrer... y otros que se entregaran con la misma intensidad pero sin haber conseguido fama ni reconocimiento alguno.
Asesinos, los hay a patadas: las cárceles están, iba a decir llenas, pero por desgracia vaciándose. Sin contar los que no pagaran nunca por sus delitos.
¡Ostras, cuanto me estoy enrollando!!!
Resumiendo: gente normalita del montón, creo que somos la mayoría, demonios hay muchos y verdaderos ángeles no tantos.
(Aunque también está el arcángel Gabriel, jejejeje, imposible obviarlo en estas fechas ya que sin él, no estaríamos celebrando las navidades) XD))
Tengo pendiente ir a leer tu Macondografía, tú dame tiempo, jejej, suerte que los posts no caducan como los yogures ;D
ResponderEliminarMuchísimos besitos, cariñico!!
Jajajaja, puedes enrollarte todo lo que quieras, Emy, me encanta aprender de vuestros comentarios y además, en este tema, creo que coincidimos todos.
ResponderEliminarPara resumir un poco: ¡¡¡ yo sólo quiero que se sepan las buenas acciones también, que las hay, que estoy harta de escuchar las atrocidades que cometen desalmados, incluso con sus propios hijos....tienen que ser demonios por fuerza, y es que la culpa, en gran parte la tenemos nosotros, que no sabemos vivir sin el morbo que dan estas noticias!!
Ufff, bueno....ya.
Pásate por casa de Chema cuando quieras, ya sabes que no me voy a mover de allí, jajaja.
Besos apretaos
Pues yo creo que casi todos somos unos cabronazos de tomo y lomo, con gotas de gente buena. Luego, las tesituras de la vida te ponen en un lado o en otro. O te dejan desorientado en medio de la calle y sin llaves.
ResponderEliminarEsta semana se nos ha muerto, lo que todo parece indicar que era un ángel: Nelson Mandela. Y andamos todos glosando el gran legado que nos deja. Hasta que lo entierren, luego vendrán algunos aniversarios donde volveremos a glosar su importante legado y mientras tanto, que sigan matando en Siria, Centroáfrica, Irán, Afganistán...
Bueno, bueno, que se me va la olla.
Besos apretaos y no me hagas caso.
Tienes razón... pero esto es así, los grandes representantes de la paz, la justicia y la igualdad mundial son iconos que nos tienen que servir de ejemplo cuando ya están muertos y lo harán el tiempo justo que dure en la memoria.
ResponderEliminarPorque lo bueno no mueve al mundo a seguir a nadie, sin embargo, las guerras, los crímenes y las atrocidades siempre tendrán a gente dispuesta a seguirlos aunque ni siquiera sepan porqué están luchando.
Creo lo contrario que tú....creo que todos venimos con una dosisde cada cosa y que vamos alimentando según disfute... no nacemos cabronazos...nacemos plastilina moldeable.
Muchos besos apretaos.
Yo creo que todo depende de los ojos con los que mires la vida. Quiero creer que hay más ángeles, pero la vida me va enseñando poco a poco sus demonios. Todos, por mucho que lo neguemos, tenemos esa doble "moral" y la vamos enseñando según nos convenga. Las cosas que nos van pasando a lo largo de la vida nos hacen ser una cosa u otra, pero en nuestro interior está verdaderamente adoptar uno u otro personaje.
ResponderEliminarBesos y abrazossss ^^
Claro, también, Imaginativa, todos queremos creeer que es lo bueno lo que nos rodea, porque en todos nosotros sigue estando la esperanza de que la maldad sólo está en momentos puntuales, que es un porcentaje minoritario, pero el miedo está ahí, a que los malos vayan ganando terreno.
EliminarLo que no creo es que todos tengamos lo bueno y lo malo y los enseñemos según conveniencia, porque eso sería el colmo, el límite, la cota más alta de la maldad, prefiero pensar que son circunstancias las que llevan a a la gente a ser mala o ser buena, pero no serlo cuando queramos y según elección.
Besos apretaos, amiga.
Hay de todo en esta vida, sieempre ha sido así cielo...
ResponderEliminarEs más las mismas personas que a veces son ángeles, pueden ser demonios y viceversa... de lo que hablas son casos extremos, aun así de verdad creo que en le fondo de la peor persona de este mundo hay algo bueno... en la vida cada uno decide lo que le tira y si se deja tirar... a unos los llevan al fondo y ahí se quedan... la vida es muy puñetera a veces y vete a saber por qué ocurre lo que ocurre y algunas personas sacan lo peor de sí...
A mi me gusta ver los ojos, la mirada, el gesto mucho más que las facciones que a veces ni veo, eso me vale muchisimo para tener una u otra sensación, aquí también les veo gesto a las palabras, sonará raro pero es verdad... el tuyo me gusta.. sieempre me ha gustado...no sé si eres angelito o no pero... ¿no te parecen un poco empalagosos los angelitos? ... a mi me gusta la buena gente, con todas sus meteduras de pata e imperfecciones, pero de buen fondo, con eso me vale.
Un beso muuuy graande y enhorabiena por esa mención en el blog de MACONDO, ando taan acelerada que me temo que no llegaré, pero da igual, como si te viera:))
Hay de todo María, por supuesto, el mundo es así, he usado la palabra "ángeles" como contrario de demonio para dar título a la entrada, no literalmente, las gentes a las que me refiero son las buenas que hay por todos sitios pero tambimén las malas, que las hay, que hacen atrocidades cada vez mayores, de las que es imposible asimilar y comprender.
EliminarNo sé, pero con los años me he vuelto desconfiada y cada vez creo más en que "las apariencias engañan".
Besos apretaos, amiga, muchas gracias por tus palabras.
Hay mucho Demonio disfrazado de Ángel y algún Ángel que se deja llevar por los Demonios, de vez en cuando....
ResponderEliminarTodos tenemos un poco de todo.
Un beso.
Ahí está la duda, Alberto, nunca sabremos cuál es cuál... y sí, también creo que a veces somos un poco diablos pero sin mucho poder, jajaja.
EliminarBesos apretaos
¡Tu mancondografía, magnífica!
ResponderEliminarMe has corroborado muchas cosas que intuía ¡Y todas buenas! jajajaja
Pues yo creo que la mayoría somos medianeros tirando a buena gente, lo que pasa es que hacemos mucho menos ruido que los malos malísimos que son cuatro pero muy builliciosos. Los buenos celestiales hacen menos ruido porque no quieren llamar la atención. :D
Besazo
Y que lo digas,Doleguita, verás el día que yo enseñe la cola y los cuernitos...¡os vais a enterar!
EliminarBesos apretaos, preciosa.
Supongo que debemos fiarnos de nuestro instinto, al principio no nos queda de otra. Biquiños!
ResponderEliminarSí, a veces nos fiamos demasiado de nuestro instinto y podemos fracasar estrepitosamente....o no.
EliminarBesos apretaos
Dicen que hay más personas buenas que malas...eso me hace tener esperanza en el genero humano!!!
ResponderEliminarUn abrazo angelito!!!
Por algo dicen que es lo último que perdemos, la esperanza, amiga Bohemia.
ResponderEliminarBeso apretao para tí
Solo quiero pensar en los ángeles...lo que pasa es que los demonios pueden hacer tanto daño que extienden su mal afectandonos a todos...las personas de bien sentimos empatía y por tanto sufrimos cuando el mal hace sufrir y de algún modo sufrimos todos...
ResponderEliminarEl bien se calza con zapatitos de bailarina y casi no se oye..será por eso que a veces dudemos si esta entre nosotros pero yo...yo estoy segura....
Un abrazo enorme Yeste...vendo del blog de Macondo y....no sabes lo que me has hecho emocionar preciosa mía...
Yo sí que soy tonta.... Nadie puede dudar de la existencia de los ángeles, no había pensado que ahí cerquita estabas tú y tus alitas....
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado, Lehahiah.
Besos apretaos.
Ambos existen.
ResponderEliminarUn beso.
Yo desde luego prefiero a los ángeles, Un abrazo grande para ti.
:)
Desde luego, Amapola, debía ser un mundo de buena gente.
EliminarBesos
Voy para allá: Por muchos cabrones que existan siempre habrá gente más buena y auténticos ángeles. Pero los malos hacen más ruido.
ResponderEliminarBesos.
Sí Rafa, menos mal que eso es así sino el mundo entero sería un infierno.
EliminarBesos
Un montón de preguntas de difícil respuesta...
ResponderEliminarTodos tenemos bien y mal dentro, pero... hay que saber inclinar bien la balanza...
Muchos besos.
Todo ser humano lleva dentro dualidades pero ésa es la peor.
EliminarBesos apretaos Misteriosa
Hay más ángeles lo que pasa que son más discretos que los demonios.
ResponderEliminarSi,
prefiero pensar eso.
Un abrazo
Estamos de acuerdo, Malque pero también deberíamos estar al tanto de las buenas obras, no solo enterarnos de las atrocidades.
ResponderEliminarBesos apretaos.
Los ángeles viven alrededor, silenciosos y sin hacerse notar. Los demonios llaman la atención, gritan y son un dolor de muelas.
ResponderEliminarLo peor es cuando muchos de nosotros somos ángeles y demonios al mismo tiempo. Hay una estrofa de una canción de Fito que dice " A través de mis orejas, discutiendo a pleno grito, el demonio a mi derecha, a la izquierda un angelito". Más real imposible. Así me siento yo mil veces al día.
Un beso angemoniaco.
pd: imposible hacer la tontá para mañana, no me lo tengas en cuenta!!!
Jajaja, justo a tiempo, Ana, iba a publicar ya, menos mal que me da tiempo a quitarte de la lista.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, amiga, espero tenerte la próxima vez.
Besos apretaos