TONTÁS --6-- MARZO 2014

Esta vez la idea de la Tontá, se la debo al amigo Chema, de Bitácora de Macondo... idea que me surgió mientras comentábamos una información.

Sé que poca gente sabrá de quiénes les  estoy hablando y también sé que los que lo sepan, seguramente serán de Andalucía.

No es una música magistral ni sublime, ni siquiera una muy  buena música, pero sí una música que el hecho de darla a conocer al público, les produjo a sus intérpretes una ilusión y una alegría que ya a la altura que se encontraban de la vida no se hubieran esperado ni locos, aunque un poco locos sí que estuvieron todos los que se metieron en una aventura que, como poco, les iba a traer la cola de comentarios.

 

Triana Pura 

 

Triana Pura engloba a José Moreno Moreno, “El Herejía” (Sevilla. 1937) Encarnación Carrasco Morales, “La Perla” (Sevilla. 1933), Pastora Cruz Moreno, “Pastora la del Pati” (Sevilla. 1923), José Manuel García “El Coco” (Sevilla. 1932), El Juto (Sevilla. 1932) y Esperanza “la del Maera” (Sevilla. 1922), alma del grupo y que fue la primera en fallecer en 2001

 Estos "chicos" hacen una música casi exclusivamente festera, bulerías, tangos, rumbas y canciones populares, ponen interés en recoger cantes antiguos, casi perdidos en el tiempo y versionarlos a su manera, a la manera de su entendimiento, a la manera de lo que escuchaban cuando eran jóvenes y disfrutaban con esa clase de música, ponen en ello la ilusión que les quedó de aquellos años, ilusión renovada que fue creciendo al comprobar, que efectivamente, su estilo y sus edades podían tener cabida en algunos sectores musicales.

Aunque el grupo surgió en 1983, no fue hasta 1998 cuando se abren paso con su primera grabación donde se incluye el tema "Probe Miguel", de la que se venden más de 150.000 copias y que además de empezar a tener fe en ellos mismos, les supuso su primer Disco de Oro...¿cómo iban ellos a pensar siquiera que iban a conseguir eso, ellos que no eran cantaores profesionales? ¿Quién podía imaginar que alcanzaran el éxito a los 70 y 80 años?...aquello era impensable.

Y es que a pesar de haber conocido la fama a una edad tan avanzada, hay que tener en cuenta, que entre los componentes sumaban la friolera de casi cinco siglos de edades con solera, igualito que ahora, que las generaciones más nuevas no tenemos ese aguante, ellos llevaban con orgullo y la frente muy alta su arte a quien lo quisiera escuchar, sin pensar en que también llevaban a cuestas achaques y juergas, dolores y palmas, bulerías y, como un miembro del grupo decía... "un cargamento de pastillas entre todos"

                          

Estos chavales, que no eran profesionales del gremio artístico, tenían tras de sí, sus propias experiencias, entre ellas, la de recorrer ahora el Puente de Triana para algo más que para cantar por cuatro perras y a veces por las cuatro perras y un bocadillo,  porque nadie les conocía, cada uno por separado, cuando en el mismo sitio al conocido de turno, le pagaban 300 pesetas por un cante.

Hicieron su vida, no cantando, ni bailando, entonces, antes de llegar a lo que llegaron cuando nadie lo esperaba, eran hombres y mujeres normales, trabajados como todos en aquellos tiempos de miseria, alguno como operario del puerto, otros albañiles, tenderos, palmeros en los tablaos o amas de casa retiradas de los escenarios porque le tocó vivir con un marido celoso.

Vivieron la Sevilla de las trágicas riadas, del hambre en los corralones de vecinos, del Triana barrio con olor a jazmines,  de los niños lavados en lebrillos y de higos chumbos pregonados en las esquinas, de las casas encaladas con aroma húmedo del cercano Guadalquivir.

Esperanza la del Maera, la que fuera el alma del grupo, contaba que la gente les pedía autógrafos y como la mayoría no sabían escribir, echaban un garabato en el papel e improvisaban estrofas de tangos y chuflas que hacían felices a sus fans.

Posiblemente, el secreto de su éxito estaba en que cantaban lo que se había perdido o no querían que se perdiera.  Fueron un elixir de memoria y recuerdo de la Sevilla añeja.

Lo que mucha gente no sabrá es que el éxito de este grupo de disparatados sevillanos "jovenzuelos", es una versión de un tema colombiano cuyo autor original fue el maestro Rafael Escalona. Y la canción sonaba tal que así:

                                                  ivan villezuelo, marina quintero
                                                                                                    y banda sinfónica de antioquia







 ¡¡Pasen y lean, señores!!





 Covadonga-- (Diario de una familia con adolescentes)
Anabel -- (La puerta deshecha)
Lehahiah -- (Los sueños de Lehahiah) 
Mandarica -- (Mejor será que corras)
Luisa --  (Mis ideas cotidianas)
Yeste -- (Mis queridas personas)
Bypils-- (Nonperfect.com) 
Inma -- (Territorio sin dueño)